Durante gran parte de su vida, el actor Colin Farrell fue denominado el “rey” de los excesos: drogas, alcohol y mujeres. Su vida estaba fuera de control, siempre se le veía con un vaso de cerveza o cigarro en la mano.
No hay que negar que tiene gran talento para la actuación y le ha dado frutos. Pero, no es simple entrar al mundo del espectáculo joven, ya que en plena juventud, es muy fácil creerse el rey del mundo.
Los excesos del actor eran incontrolables, siempre era el último en cada fiesta, ya sea tomando o consumiendo sustancias ilícitas. “Durante años pude permitirme ciertas cosas. Tuve una alta tolerancia a varias drogas”, reveló.
Su salvación
Bien dicen que para cada persona hay un ángel, en el caso de Collin es James Padraig Farrell, el primero de sus dos hijos. A los siete meses de nacido, los médicos descubrieron que padecía el síndrome de Angelman, una afección neurogenética poco frecuente.
Este acontecimiento fue suficiente para que Collin decidiera cambiar su vida. En el 2005, ingresó a un centro de desintoxicación, gracias a ello dejó su vida de excesos.
“Básicamente he estado borracho o drogado desde que tenía 14 años, consumía veinte píldoras de éxtasis, cuatro gramos de cocaína, tres botellas de whisky, doce de vino y 30 litros de cerveza y 280 cigarrillos». reveló.
Rehabilitación difícil
En el 2018, decidió dar un paso al lado con respecto a su carrera, ya que venía de grabar muchas películas consecutivas y de alguna manera se veía tentado a recaer.
Entonces tomó la decisión de internarse. «Ha estado sobrio desde hace 12 años y quiso internarse para asegurarse de que no volvería a recaer. Se está tomando algo de tiempo para él», dijo la clínica.
Lucha por la tutela de su hijo
En la actualidad, el hijo de Colin ya tiene 18 años y el actor está en busca de su tutela. Ya que, al ser alguien con una enfermedad rara, tiene que presentar una extensa lista de documentación para solicitarla.
“Su existencia ha sido para mí una bendición, no un peso. Gracias a él he madurado, me he convertido en una persona más profunda. ¿Y él? Es un niño que demuestra una valentía increíble. Es dinamita, es mágico. Verlo enfrentar los obstáculos es una inspiración”, se sinceró el artista irlandés.