Anna Sorokin, conocida como Anna Delvey en la serie de Netflix, tiene 31 años y fue una impostora socialité que inspiró la exitosa serie de la plataforma ‘Inventando a Anna‘. Esta mujer fue acusada de mentir sobre su identidad y hacerse pasar por una rica heredera para robar dinero a personas influyentes.
Anna llegó a New York en 2013 con el objetivo de abrir un club para las artes para gente adinerada, sin embargo, terminó en prisión antes de cumplirlo, pues sus mentiras salieron a la luz.
La familia de Anna Sorokin no era millonaria como la describía en sus conversaciones, su padre era un chofer de camiones y su madre era dueña de una pequeña bodega.
La impostora dejó de estar bajo custodia de ICE y será deportada a Alemania. Según reportaron, Sorokin voló a Frankfurt, Alemania el lunes en la noche. Anna pasó casi cuatro años en la cárcel y ha sido liberada en febrero de por buena conducta. No obstante, fue detenida debido a que su visa para mantenerse en Estados Unidos expiró.
Neffatari Davis, amiga de Anna, señala que Sorokin ya pagó su mal y declaró a The New York Post: «Ella usó el dinero que le dio Netflix para devolverle dinero a todos, ya ella no debe dinero. Ella ha pagado sus crímenes, no mató a nadie».