Nos encontramos en la estación más calurosa del año y, por ello, aumentan nuestras ganas de consumir productos refrescantes como los helados y las frutas. Sin embargo, es importante ser precavidos y cuidadosos con los alimentos que estamos consumiendo. Por ello, el Instituto Nacional de Calidad (Inacal) señala que es esencial verificar la calidad y la fecha de vencimiento de los productos que compramos.
Con el objetivo de proteger la salud de los consumidores, la institución menciona que un punto clave a tomar en consideración es verificar la información contenida en las etiquetas de los productos. En estas podremos tener conocimiento de los ingredientes, valor nutricional y fecha de vencimiento de lo que consumiremos. Ante ello, Inacal establece estándares de calidad que deben cumplir los helados y las frutas a través de las Normas Técnicas Peruanas (NTP).
Principales recomendaciones de calidad
Helados:
Libres de gránulos de grasa y no poseer sustancias, ni partículas extrañas. En cuanto a la apariencia, esta debe ser atractiva, de textura suave, consistencia uniforme, no tener hielo visible, ni cristales de lactosa. Es importante tener en cuenta que las mezclas líquidas para preparar helados deben ser previamente pasteurizadas o sometidas a cualquier otro proceso de higienización aprobado.
Sandías:
Limpias y libres de cualquier materia extraña visible. No presentar daño causado por plagas y enfermedades que afecten la pulpa. De igual manera, firme y suficientemente madura; presentar condiciones adecuadas que permita soportar el transporte, manejo y la llegada a su destino en estado satisfactorio.
Uvas:
Sanas, limpias, libres de cualquier olor y sabores extraños. Además, las bayas de uva según la variedad deberán estar enteros, bien formados, y suficientemente desarrollados. De igual modo, para su comercialización cada envase deberá etiquetarse con el nombre del producto, las variedades de la uva y el país de origen.
Mandarinas y naranjas:
Enteros, limpios, sanos, libres de magulladuras y amplias cicatrizaciones por cortes en la cáscara; libres de olores y sabores extraños y de daños causados por plagas y enfermedades que afecten la pulpa. De la misma forma, no deben presentar daños causados por quemaduras de sol, heladas y bajas temperaturas. Asimismo, deben estar libres de toda señal de desecación o deshidratación.
Mangos:
Enteros, sanos, limpios y libre de cualquier materia extraña visible. De la misma manera, libre de daños causados por plagas y de cualquier olor y sabores extraños. No solo ello, sino también ser de consistencia firme, así como tener un aspecto fresco y no presentar daños causados por bajas o altas temperaturas. Por último, estar exentos de manchas y magulladuras.