Quizás en más de una oportunidad te sentiste cargado con muchas cosas y necesitabas botar todo. Sin embargo, te dio mucha vergüenza exteriorizar tus sentimientos y contárselo a alguien más. La técnica de ventilación emocional es la adecuada para este tipo de casos.
La ventilación emocional es una técnica que se usa de manera intrapersonal, es decir no involucra a otros individuos en este método. Consiste en expresar nuestras emociones de diversas formas para liberarnos de lo que tenemos dentro.
Un ejemplo de ello es cuando una persona descubre una infidelidad. Lo más complicado en este caso es asimilar el engaño de la otra persona. El vínculo amoroso te impide aceptar que tu pareja podría traicionarte. Lo más recomendado en esta situación es darte un tiempo para recuperarte emocionalmente e ir eliminando las posteriores inseguridades.
Pasos para realizar la ventilación emocional
Reprimir nuestras emociones es dañino, ya que solo origina mayor estrés. Lo mejor es darte un tiempo para que las manejes de forma saludable, expresándolas de alguna forma.
Realizar algunas técnicas psicológicas te permitirán sentirte mejor. Por ello, si deseas llevar a cabo la ventilación emocional, te presentamos dos pasos para que puedas desarrollarlo desde tu hogar:
- Hacer una pausa para respirar: Debes reconocer la emoción que estás sintiendo en ese momento. Tienes que identificar cuál es (enojo, tristeza, miedo, etc.) y reflexionar por qué te sientes así. Cierra los ojos y respira profundamente, presta atención a tus sensaciones corporales. Cuando encuentres una conexión con tu mundo interior, ahí podrás realizar la técnica.
- Aplicarla: Luego de canalizar y reconocer tus emociones, procede a escribir, dibujar, cantar, hablar o lo que te guste hacer para intentar eliminar ese sentimiento que te está reprimiendo.
