Estudio de Mattel revela que el juego es clave para aprender y fortalecer vínculos en todas las edades

La investigación global “The Shape of Play” destaca que jugar mejora la salud emocional, impulsa la creatividad y fortalece las relaciones familiares.

En el marco de su 80 aniversario, la compañía Mattel presentó los resultados de su estudio internacional “The Shape of Play”, que analiza la importancia del juego en el desarrollo humano. El informe, basado en encuestas a más de 33,000 personas en países como Estados Unidos, Brasil, Alemania y China, revela que el 94% considera que jugar es relevante para todas las edades y que el 85% lo ve como esencial en la vida diaria.

Los resultados muestran que el juego cumple un rol fundamental más allá del entretenimiento: reduce el estrés, mejora la salud emocional y fomenta la conexión social. Además, el 87% de los encuestados afirma que jugar ayuda a combatir la soledad, mientras que casi un 70% reconoce que sus mejores ideas surgen mientras juegan.

Aunque la tecnología y las rutinas laborales compiten por el tiempo libre, el estudio destaca que el 81% de los adultos valora los juguetes físicos como parte de una experiencia lúdica enriquecedora, complementaria a los videojuegos o actividades deportivas.

Mattel identifica cuatro formas principales en las que el juego contribuye al aprendizaje: desarrolla habilidades cognitivas, alienta la comunicación, fortalece la resiliencia y promueve la autonomía. Actividades como construir, imaginar o resolver retos estimulan la concentración y el pensamiento lógico; mientras que los juegos de rol fomentan la empatía, la expresión y la negociación entre los niños.

El estudio también enfatiza que no existe una única forma de jugar. Cada cultura adapta sus propias dinámicas, pero todas comparten un mismo valor: el juego como espacio de bienestar y aprendizaje. En contextos urbanos como el peruano, donde los horarios laborales y el ritmo de vida reducen el tiempo familiar, estos momentos se convierten en oportunidades esenciales para educar y conectar.

A lo largo de sus ocho décadas, Mattel ha acompañado a generaciones con marcas como Barbie, Hot Wheels y Fisher-Price, reafirmando su compromiso con el desarrollo infantil. La empresa sostiene que el juego no es un lujo, sino una necesidad, capaz de inspirar, educar y fortalecer los lazos familiares.

En la crianza moderna, el mensaje del estudio es claro: jugar enseña, une y transforma. Dedicar tiempo al juego no solo significa diversión, sino también la oportunidad de formar valores y recuerdos que perduren más allá de la infancia.