La piel de los bebés, extremadamente sensible y vulnerable, requiere cuidados especiales durante su primer año de vida. Factores como el clima, la temperatura del agua, la alimentación, y la calidad de los pañales y toallitas húmedas pueden influir en su salud cutánea. Con el tiempo, la piel del bebé se fortalece, pero es crucial seguir una rutina de cuidado desde el nacimiento para mantenerla en óptimas condiciones.
Aquí te ofrecemos algunas recomendaciones prácticas para cuidar la piel de tu bebé, proporcionadas por expertos de Huggies, líder en el cuidado infantil:
1. La hora del baño:
El baño debe ser una experiencia placentera y segura. Utiliza agua tibia, evitando temperaturas extremas, y elige productos hipoalergénicos como jabones neutros sin fragancia y toallas de algodón suave. Limita el tiempo de baño para prevenir la resequedad o irritación. Huggies ofrece una línea de shampoo, jabones y cremas anti escaldaduras, dermatológicamente probados y libres de colorantes y parabenos, con ingredientes naturales. Además, los productos son oftalmológicamente probados, evitando irritaciones en los ojos.
2. Hidratación adecuada:
La piel del bebé es propensa a la resequedad, especialmente en climas fríos o secos. Aplica una crema humectante dermatológicamente aprobada sobre la piel ligeramente húmeda después del baño, siguiendo las recomendaciones del pediatra. Esto ayuda a mantener la piel suave y flexible al sellar la humedad.
3. Cambio de pañal frecuente:
La zona del pañal es vulnerable a irritaciones debido a la exposición constante a la humedad. Opta por pañales suaves, transpirables, hipoalergénicos y de alta absorción. El nuevo pañal Huggies Dermacare, con su fórmula enriquecida con vitamina E y antioxidantes, ofrece protección prolongada de hasta 12 horas con un diseño ultradelgado y suave al tacto, similar al algodón.
4. Ropa adecuada:
Elige prendas de algodón que permitan la transpiración y se adapten cómodamente al cuerpo del bebé. Durante los primeros meses, lava la ropa del bebé por separado utilizando detergentes suaves y específicos para su edad para evitar irritaciones.
5. Cuidados ante cambios climáticos:
La piel del bebé puede reaccionar a variaciones de temperatura. En días calurosos, evita la exposición directa al sol y mantiene al bebé fresco. En invierno, aplica una capa adicional de crema humectante para prevenir la sequedad.