Sin importar las bajas temperaturas que ya se asoman en la capital limeña, miles de peruanos caminaron por la Costa Verde, para llegar al Arena 1 en San Miguel y ver a su artista favorita: Karol G.
Antes de empezar el evento, en las afuera del recinto se vivía un alboroto total, gran contingente policial resguarda la zona, las clásicas reventas andaban por allí y algunos que aprovechaban en comprar el clásico pan con chorizo para que puedan aguantar hasta las 11 de la noche que acababa el show. Ya en el interior solo quedaba esperar, hasta que lleguen las 9 p.m., hora en la que saldría a escena la artista.
Un poco después de la hora programada fue cuando las luces se apagaron, el conteo regresivo empezó, y al llegar a 0, se abrió el telón, la música comenzó a sonar, los lanzallamas se dispararon y el Arena 1 fue testigo de la alegría de los miles de fanáticos, quienes no dejaban de gritar ante la inminente salida de Karol G. “Me canse de relaciones no quiere más presiones”, fue la primera estrofa que entonó la cantante colombiana durante su segundo show en el Perú.
Momentos de incertidumbre
Sin embargo, no todo fue felicidad. Minutos antes de que se presentará Karol G, algunos fanáticos empezaron a pifear y otros hasta optaron por sentarse esperando su llegada, pues ya se había retirado el DJ que hace poco los entretenía. Hasta que de pronto, con las luces aún prendidas y coordinando los pormenores, se vio a lo lejos, una mujer vestida de pantalón blanco en el fondo: era ella, Karol G.
Empezó el verdadero alboroto, los que estaban más atrás comenzaron a empujar, y fue en ese momento que por coincidencias de la vida, que los presentes en el evento que se encontraban en la zona “Bichota” se quedaran sorprendidos, pues se vio a un persona con look de reguetonero, portando unos lentes oscuros y con gorra. Su apariencia engañó a más de uno, pensaron por un momento que se trataba de Anuel, la expareja de la cantante. Tanto así, que algunos se animaron hasta en sacarle fotos.
Otros por su lado, pancarta en mano no dejaban de corear el nombre de la artista, hasta que esta salió. Acompañada por su banda conformada enteramente por mujeres, a quienes la interprete colombiana les dedicó unas palabras.
Durante el show que duró un poco más de dos horas, Karol G recibió regalos por parte del público. Uno fue, un ramo de rosas entregado por parte de los asistentes venezolanos, y otro cuando, le hicieron llegar una bandera peruana que tenía en el centro escrito “Team Bichota”, el regalo estuvo acompañado por una muñeca que era la réplica de la cantante. Esto último hizo que se generara un loquerío total y los fanáticos a toda voz gritaran “Perú, Perú, Perú”.
Karol G y su shot
En la presentación que realizó la cantante colombiana en el país, decidió replicar lo que venía haciendo en las anteriores y se tomó un shot con los presentes en el evento, quienes alzaron los que tenía sus vasos de cerveza, otros latas e incluso hasta aguas para brindar con la artista.
“Vamos a brindar porque estamos aquí todos juntos esta noche…vamos a brindar porque vinimos a cumplir sueños a esta tierra…esta canción se la compuse a una amiga”, dijo Karol G mientras sostenía el vaso en la mano, cuando empezó la melodía de “200 copas”.
Carolina Giraldo Navarro (verdadero nombre de la artista) además interpretó también canciones como: “El Barco”, “Créeme”, “A ella”, “El MAKINON”, “Ocean”, entre otros.
Final del concierto
Antes de que acabe el día, ya pasada las 11 de la noche, Karol G se animó a cantar su más grande éxito. “Ustedes la pusieron número uno en el mundo” dijo y prosiguió a entonar “Tusa”. Canción que al igual que el día anterior pidió durante un momento que solo fuera cantada por los hombres.
“Pero si le ponen la canción, le da una depresión tonta, llorando, lo comienza a llamar, pero él la dejó en buzón, será porque con otra está, fingiendo que a otra se puede amar”, retumbó dentro del Arena 1 en la voz de los presentes del género masculino, quienes dejaron todo.
El último tema que cantó en Perú, la colombiana fue “Provenza”, canción con la que se juntó durante la última parte a su elenco de baile en el centro del escenario y saltando a viva voz hasta que acabe y empezaran a despegarse los papelitos color rosado, que indicaban que el final del show había llegado.
Aunque no todo quedó allí, pues luego de su salida, los miles de peruanos cantaron sin música de fondo y a capela: “Hace tiempo que no sé nada de ti, estaba con alguien pero ya estoy free”, despidiéndose así del Arena 1 de San Miguel.
Una vez acabo el show, al mismo estilo de las procesiones religiosas, los asistentes al evento invadieron las vías de la Costa Verde y subieron caminando, uno detrás de otro, por la subida de Bertoloto. Durante el trayecto en donde se observan las pelucas del color del pelo de la artista tiradas por la pista, algunos se paraban para descansar un rato, otros para esperar a su amigos y algunos buscando que comer. Y es que a las afueras del recinto se podía encontrar desde un pon con pollo, anticucho y hasta su buen lomo saltado.