El incremento de las transacciones digitales ha cambiado la forma en que los peruanos administran su dinero. De acuerdo con la ‘Asociación de Bancos del Perú (Asbanc)’, en 2024 se registraron más de 1,500 millones de operaciones digitales, un 35% más que el año anterior. Sin embargo, este avance también trae consigo mayores desafíos en seguridad. A pesar de que el número de ciberataques se redujo en comparación con 2023, el ‘phishing’ sigue siendo una de las amenazas más frecuentes, tanto para usuarios individuales como para empresas.
Ciberataques y protección de datos
En los primeros meses de 2024, Perú registró más de 1 millón de ciberataques, de acuerdo con Fortinet. Aunque la cifra es inferior a los 5 millones reportados en 2023, los expertos advierten que el fraude digital sigue en evolución y representa una amenaza constante.
Angel Moreno, CISO de Ligo, resalta que «uno de los mayores desafíos para los usuarios digitales es proteger su información personal al realizar transacciones en línea. Ataques como el ‘phishing’ o el robo de credenciales están en aumento, y la mejor defensa es educarse sobre buenas prácticas de seguridad».
Recomendaciones para transacciones seguras
Para minimizar riesgos, Moreno comparte cinco consejos clave:
- Crea contraseñas seguras y exclusivas: Usa combinaciones de letras, números y caracteres especiales.
- Activa la autenticación en dos pasos (2FA): Añade una capa extra de seguridad mediante un código adicional.
- Evita redes Wi-Fi públicas: No realices transacciones en redes abiertas para evitar la intercepción de datos.
- Mantén tus aplicaciones actualizadas: Las nuevas versiones incluyen mejoras en seguridad.
- Desconfía de enlaces sospechosos: No ingreses a páginas de dudosa procedencia ni compartas información personal.
La educación como primera línea de defensa
Según un informe de Kaspersky, el 70% de los ciberataques ocurren por errores humanos, lo que refuerza la necesidad de fomentar una cultura de seguridad digital. Moreno enfatiza que «el crecimiento de las transacciones digitales en el país es una gran oportunidad, pero también exige mayor responsabilidad en seguridad. En Ligo, trabajamos constantemente para brindar tecnología robusta que proteja a nuestros usuarios, pero la primera línea de defensa siempre será el conocimiento y la prevención».
El avance de la digitalización en el país requiere que las estrategias de protección también evolucionen. Adoptar buenas prácticas en seguridad y mantenerse informado sobre los riesgos en línea no solo disminuye el peligro de fraude, sino que también permite disfrutar de un ecosistema financiero más seguro y confiable.