Flor de Caña, una de las casas roneras más emblemáticas de Centroamérica, conmemora 135 años de tradición, sostenibilidad y excelencia con una creación histórica: Flor de Caña 35 Años, el ron más añejo y exclusivo que la marca ha presentado hasta hoy. La edición marca un hito para la compañía fundada en 1890, cuyos procesos artesanales han sido resguardados por cinco generaciones familiares.
Este extraordinario ron ha sido añejado de manera natural durante 35 años en barricas de roble blanco americano, dentro de la reserva privada de la familia en Nicaragua. Su origen, moldeado por el terroir volcánico ubicado entre el volcán San Cristóbal y el océano Pacífico, le otorga un perfil aromático complejo y un acabado notablemente suave, fruto de la interacción entre tierra, mar y fuego.
La edición estará limitada a solo 350 decanters de cristal de 700 ml disponibles a nivel mundial, cada uno con un precio de US$4,000 y acompañado de un certificado de autenticidad numerado. Cada pieza ha sido diseñada como una obra de arte: siluetas, relieves y formas inspiradas en las líneas del volcán San Cristóbal, cuidadosamente esculpidas, acabadas a mano y pulidas para resaltar los tonos dorados y cálidos del líquido envejecido.
El decanter está coronado por un tapón de roca volcánica de obsidiana, tallado y ajustado individualmente, además de un collarín de cuero que simboliza el compromiso continuo de la marca con la sostenibilidad. La presentación se completa con un estuche de madera de nogal, grabado con representaciones de la flora que rodea al volcán, reforzando la identidad geográfica y espiritual del ron.
“Flor de Caña 35 Años representa la esencia, los valores familiares y la tradición artesanal que han definido nuestra marca durante 135 años. Más que un objeto de colección, es un tesoro del tiempo creado para quienes valoran la autenticidad y la excelencia”, afirmó Tomás Cano, Maestro Ronero de la casa durante casi cuatro décadas.
Además de la versión de 700 ml, Flor de Caña lanzará una edición de 100 ml en decanters de cristal, presentados en un elegante estuche esmeralda, con un precio de US$630, ideal para coleccionistas que buscan una pieza más accesible dentro de la línea ultra-premium.
Con este lanzamiento, Flor de Caña reafirma su posición como una de las casas roneras más prestigiosas del mundo y celebra más de un siglo de historia, innovación y compromiso con la calidad.

