De acuerdo a un estudio publicado en la revista Journal of Epidemiology & Community Health el ejercicio físico puede beneficiar la salud cerebral y cognitiva. Los investigadores analizaron los datos de actividad de casi 4.500 personas del Reino Unido y descubrieron que aquellos que realizaban ejercicios moderados obtenían evaluaciones cognitivas significativamente más altas que quienes pasaban la mayor parte del tiempo sentados, durmiendo o realizando actividades ligeras.
Los hallazgos sugieren que las personas activas demostraron una mejor memoria de trabajo y una mejora notable en los procesos ejecutivos como la planificación y la organización. Por el contrario, quienes optaban por estilos de vida más sedentarios experimentaban disminuciones de entre el 1% y 2% en sus capacidades cognitivas.
Si bien los beneficios del ejercicio para la salud física son ampliamente conocidos, este estudio respalda aún más la importancia de mantenerse activo para preservar y potenciar las funciones cerebrales.
Por eso, es recomendable incorporar actividades como entrenamiento HITT, correr, nadar, montar en bicicleta o bailar para elevar el ritmo cardíaco y obtener los mayores beneficios cognitivos. Incluso actividades más breves pero intensas como saltos, sentadillas o caminatas rápidas pueden marcar una diferencia significativa en comparación con los estilos de vida sedentarios.
En resumen, el estudio refuerza la importancia de priorizar el ejercicio moderado y vigoroso en la rutina diaria, no solo para la salud física, sino también para optimizar la memoria, la concentración y las habilidades cognitivas en general.
¿Qué es entrenamiento HITT?
El entrenamiento HIIT (High Intensity Interval Training) se ha convertido en una de las modalidades de ejercicio más populares en los últimos años, gracias a su eficacia para obtener resultados completos en sesiones cortas y de alta intensidad.
A diferencia de los entrenamientos tradicionales más extensos, el HIIT se basa en períodos breves alternados de ejercicio intenso con intervalos de recuperación activa. Estas sesiones, que suelen durar entre 10 y 30 minutos, permiten aprovechar al máximo cada minuto dedicado al ejercicio.
Una de las principales ventajas del HIIT es su versatilidad. Si bien se pueden utilizar materiales como cuerdas, bicicletas o pesas para aumentar la intensidad, también es posible realizarlo en casa utilizando únicamente el propio peso corporal. Esto lo convierte en una opción accesible y práctica para quienes no pueden acudir a un gimnasio regularmente.