Robert Francis Prevost, nacido en Chicago y con una larga trayectoria en el Perú, fue elegido como el nuevo líder de la Iglesia Católica. Tomará el nombre de León XIV, convirtiéndose en el 267.º pontífice en la historia. La elección fue anunciada desde el balcón de la Basílica de San Pedro, donde dirigió un mensaje centrado en la paz y en una Iglesia “abierta a todos”.
El nuevo papa fue uno de los principales candidatos para suceder a Francisco, fallecido recientemente. La fumata blanca apareció el jueves por la tarde desde la chimenea de la Capilla Sixtina, señal de que los 133 cardenales del cónclave habían llegado a un acuerdo. El anuncio del «Habemus Papam» generó júbilo entre los miles de fieles congregados en la plaza.
Prevost, que actualmente tiene 69 años, pasó gran parte de su vida en el Perú, donde trabajó como misionero agustino durante los años 80 y 90. Ejerció su labor pastoral en las ciudades de Chiclayo y Trujillo, donde fue director de formación en la misión, vicario judicial de la arquidiócesis y profesor en el Seminario Mayor. En 2015, el religioso recibió la nacionalidad peruana, fortaleciendo aún más su vínculo con el país.
Hasta antes del cónclave, se desempeñaba como prefecto del Dicasterio para los Obispos y como presidente de la Pontificia Comisión para América Latina, cargos que evidencian la confianza del papa Francisco en él. Fue nombrado cardenal en septiembre de 2023. Su experiencia administrativa y pastoral, tanto en América Latina como en el Vaticano, fue clave para su elección.
Un mensaje con tono firme y cercano
Desde el balcón principal de la basílica, León XIV ofreció un discurso escrito en el que habló en español y se dirigió a los pueblos del mundo con un llamado a la unidad. “Queridas hermanas y hermanos. Este es el primer saludo de Cristo resucitado, el buen pastor que dio su vida por el rebaño de Dios. Yo también quisiera que este saludo de paz entrara en vuestros corazones y llegase a sus familias a todas las personas en todas partes a todos los pueblos a toda la tierra, La paz sea con ustedes”. Su tono, cargado de calidez, dejó entrever una intención clara: ser un papa cercano a la gente y sensible ante el sufrimiento del mundo.
Saludo especial al Perú
Durante su primer mensaje como papa, León XIV tuvo palabras especiales para el pueblo peruano. “A mi querida diócesis de Chiclayo, donde un pueblo fiel ha acompañado a su obispo”, expresó. Esta mención fue recibida con entusiasmo en redes sociales y medios peruanos, donde ya se celebra la elección como un acontecimiento histórico.
La figura de Prevost representa un puente entre culturas y un símbolo del alcance global de la Iglesia. Con raíces en Estados Unidos, formación en derecho canónico, y un corazón peruano, el nuevo papa inicia un pontificado que promete continuidad, apertura y atención a los pueblos marginados. Su elección marca un hecho sin precedentes en la historia del catolicismo moderno.
