La hora del recreo escolar es un momento crucial en el día de los niños. Durante esa pausa necesitan recargar energías, por lo que una lonchera bien preparada es la clave para que ese instante sea saludable y delicioso. Sin embargo, a menudo los padres se enfrentan con el desafío de lograr que sus hijos disfruten de estas comidas, por lo que es importante incorporar nuevos recursos que equilibren la creatividad y la nutrición.
Una lonchera soñada no solo debe ser atractiva, sino que también debe contar con elementos prácticos para consumir, que no les demanden tiempo o esfuerzo a los más pequeños. Además, debe ofrecer una variedad de sabores que mantengan su interés; en ese sentido, Del Valle Frugos presenta 04 tips esenciales con el fin de que los escolares se entusiasmen con la hora de la comida y, lo mejor de todo, que la lonchera regrese vacía al final del día.
1. Variedad de sabores: un mundo de opciones en cada bocado
Para que la lonchera sea atractiva, es importante incluir diferentes sabores, colores y texturas. Los niños suelen perder el interés si la comida se repite constantemente. Por ello, se recomienda variar los ingredientes semanalmente: sándwiches con panes integrales o de avena y diferentes rellenos como jamón, pavo, queso fresco o palta. Además, los wraps son una opción práctica y nutritiva, combinando proteínas y verduras, mientras que las frutas como manzanas y uvas añaden frescura y vitaminas.
2. Un toque delicioso y refrescante para enamorar
Las bebidas son fundamentales en cualquier lonchera, y Del Valle Frugos ofrece una excelente alternativa para mantener a los niños hidratados con sabores como durazno, mango y naranja. Estas bebidas son libres de conservantes, enriquecidas con vitaminas A, C y D, y vienen en un práctico formato de 235 ml, ideal para ajustarse a cualquier lonchera. De esta manera, los niños pueden disfrutar de una bebida deliciosa sin que se derrame o ocupe demasiado espacio.

3. Color y diversión, el éxito asegurado
A los niños les encanta la comida presentada de manera creativa. Un truco para que la lonchera sea más atractiva es cortar frutas y vegetales en formas divertidas utilizando moldes. Otra opción es preparar pequeños bocadillos coloridos como ensaladas de frutas o galletas caseras, acompañados de recipientes con aderezos saludables como yogurt natural. Estos detalles hacen que los niños se motiven más a consumirlos.
4. Los pequeños también son parte de la preparación
Incluir a los niños en la creación de su propia lonchera no solo aumenta su interés, sino que también promueve la autonomía y la toma de decisiones saludables. Puedes animar a los pequeños a elegir lo que quieren incluir en su lonchera, lo que les da un sentido de control sobre su alimentación. Además, este es un excelente momento para enseñarles sobre la importancia de llevar alimentos que les proporcionen energía y vitalidad.

