Consejos prácticos para repartir las tareas en el hogar

Organizar las tareas en el hogar es importante para que cada miembro de la familia asuma una responsabilidad.

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Un reparto igualitario de las tareas genera mejores relaciones interpersonales. (Foto: Freepik)

Las tareas en el hogar pueden llegar a ser agotantes y en algunas ocasiones generar conflictos dentro de la familia. En nuestro país, las mujeres les dedican mayor tiempo a las actividades domésticas, a comparación de los hombres.

Según la ONU Mujeres de Perú, las mujeres peruanas les dedican casi 40 horas semanales a las actividades de trabajo doméstico, esto representa 24 horas más que los hombres. Por ello, es importante tener un trabajo más igualitario para construir un buen ambiente en la casa.

Un reparto equitativo en las tareas del hogar genera mejores relaciones entre cada miembro de la familia. Por ello, el reparto debe incluir también a los hijos, pero adaptando la labor a su edad y capacidades. La edad ideal para que tus menores colaboran en casa es a partir de los cuatro años, pues ya entienden y ejecutan órdenes.

A continuación, te presentamos tres consejos para repartir adecuadamente las tareas en el hogar y lograr que todos estén cómodos y felices. Sin duda, es más sencillo tener una actitud proactiva en las actividades hogareñas si cada uno hace lo que le gusta.

Reparte las tareas en base a los gustos de cada uno

Es esencial que des a conocer tus preferencias. Si a tu pareja le gusta cocinar y a ti limpiar, entonces lo mejor es que cada uno realice la actividad que más le satisface. Si cada uno hace lo que le gusta, es más factible tener una actitud proactiva y positiva.

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(Foto: Freepik)

Reserva un momento del día donde todos estén disponibles

Elige un momento del día, de preferencia fin de semana, y logra que cada uno cumpla con su tarea correspondiente. Es importante que compartan momentos juntos y se apoyen en las diferentes labores. Esta acción ayudará a que el ambiente en tu casa sea más armonioso.

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(Foto: Freepik)

Establece un orden de prioridades

Existen tareas que son más urgentes que otras, y algunas funciones requieren de mayor frecuencia. Entre estos casos se encuentran: la limpieza de baños, lavar la ropa o los platos. Por ello, para evitar cualquier discusión es mejor establecer un cronograma de limpieza. De esta manera, todos ayudarán con las labores que son más abrumantes.

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