Aunque el verano es una de las estaciones más esperadas, también tiene sus inconvenientes, y uno de los más incómodos es el tratar de dormir fresco en una noche calurosa.
Los humanos somos seres diurnos, es decir, hemos evolucionado para dormir durante la noche, que es cuando usualmente hace más frío y está oscuro. Por eso cuando la temperatura aumenta como en verano, se nos hace más difícil conciliar el sueño.
La temperatura ideal de una habitación para dormir tiene que estar entre los 15 y 23 grados. Cuando esta es mayor a 25 grados, nuestro organismo activa la sudoración. Además, los vasos sanguíneos se dilatan para favorecer la circulación de la sangre y bajar la temperatura corporal y el cerebro pasa a un estado de alerta.
Aquí te traemos algunos consejos que te ayudarán a conciliar el sueño y a lograr dormir fresco sin utilizar aire acondicionado durante la temporada de verano.
1. Evita que tu habitación se caliente durante el día
Para evitar que tu habitación se caliente durante el día, deberás mantener tus cortinas y persianas cerradas en el día, de esta manera tu cuarto estará mucho más fresco al no recibir la luz solar y en la noche se sentirá más agradable el ambiente.
2. Escoge bien tu ropa de cama
Elige ropas ligeras, en especial opta por telas de fibras naturales como el algodón que te permiten sentirte con mayor frescura durante las noches de verano. Del mismo modo escoge pijamas cómodas para dormir.
3. Ventila tu habitación
Cuando cae la noche es el momento ideal para abrir las ventanas y puertas ya que la temperatura exterior suele bajar, esto ayudará a enfriar el ambiente.
4. Apaga las luces y desconecta aparatos electrónicos
La luz que emanan los dispositivos móviles en funcionamiento generan calor, lo ideal es apagarlos para que tus espacios se mantengan libres de la molesta sensación calurosa.
5. Cena ligero
Cuando estamos haciendo la digestión nuestra temperatura corporal aumenta, así que es mejor tomar una cena ligera, preferiblemente 2 horas antes de irte a dormir.
6. Toma una ducha antes de acostarte
Evita que el agua esté demasiado fría o de lo contrario la temperatura corporal se elevará y para poder compensarla sentirás mucho más calor.
7. Intenta mantener cuello, muñecas y tobillos frescos
Es importante mantener los puntos de pulso de tu cuerpo frescos, esto te ayudará a que no se eleve tanto tu temperatura corporal y sentirás menos calor. Procura refrescar cada una de estas áreas antes de dormir.