El motor para iniciar un cambio en la alimentación y la actividad física, debe de ser el cuidado de la salud y no el tratar de ponerse como objetivo “llegar en forma al verano”, ni perder algunos kilos de más.
Por ello, se trata de adoptar buenos hábitos que perduren en el tiempo, los cuales tendrán consecuencias beneficiosas en el aumento de la esperanza de vida, la vitalidad, mejora del descanso, el estado de ánimo y sobre todo el fortalecimiento del sistema inmune, entre otras más.
A continuación te contamos, diez conejos para que logres adquirir rutinas diarias, que a futuro repercutan en la salud y el bienestar.
1.Disciplina
Un aspecto importante para lograr adquirir buenos hábitos es cambiar el lenguaje interno y las creencias limitantes sobre los ejercicios y la dieta; aquí frases como: “Soy disciplinado”, “yo puedo con todo”, entre otras, te ayudarán en un comienzo.
2.Buscar un deporte que te gusté
Puede ser andar en bicicleta, running, natación, yoga, en realidad depende de que cada quien encuentre el complemento ideal para esas otras actividades que tal vez no gusten tanto y así poder potenciar los resultados.
3.Cambiar los hábitos alimenticios
Lo primero es saber que no siempre lo mejor es más rápido, la clave para ello, pasa por un camino más simple, en donde se aplica el sentido común. Además contemplar que muchas veces nuestra conducta alimentaria está regida por las emociones.
4.Medir el progreso sin apresurarse
El olvidarse un poco de la balanza y centrarse en la satisfactoria sensación después del entrenamiento más que en los resultados, es una de las claves para no frustrarse. Asimismo, es importante saber que los cambios llevan su tiempo. Es en ese sentido, que vale sacarse fotos o hacer videos para luego ver el “antes y después”.
5.Felicitarse a sí mismo
El propio reconocimiento del esfuerzo hecho por uno mismo, muchas veces es una gran herramienta para tomar noción del cambio real que se pusó en marcha y así valorarlo cada minuto.
Cabe recordar, que los resultados llegan con dedicación y tiempo, como cualquier logro en la vida, y después de todo, lo importante es siempre establecer hábitos que perduren durante el tiempo.